¿Qué haces primero, abriendo los ojos por la mañana?

Inmediatamente busco el teléfono y, por costumbre, voy a consultar la red social. Cinco minutos de feeds de Vkontakte, tres minutos de feeds de Facebook, dos en Instagram. Dos comentarios, 14 "me gusta": el ego se emborracha bastante y esparce endorfina y otscaBaifin en la sangre.

Una gran cantidad de noticias se acumularon de la noche a la mañana, no leeré sobre las explosiones, los accidentes y los resultados de las elecciones, no me despertaré. Veo a un cachorro atrapado en un collar y crecí en él durante unos dos años, me encrespo, me pongo una dosis de adrenalina y horror, me levanto.

El desayuno consiste en un par de huevos, condimentados con los artículos guardados de Facebook de ayer. Antes del almuerzo debe ser suficiente.

El semáforo en el camino al trabajo toma un minuto y medio, lo suficiente para descubrir qué noticias aparecieron durante estas media hora en Vkontakte, y si va en taxi, será suficiente en Instagram.

En el almuerzo, veinte minutos puede dedicarse a la comida, y el resto, bueno, por ejemplo, las redes sociales. Además, la característica de instagram apareció historias, y después de 24 horas desaparecen, es necesario tener tiempo para ver.

El día de trabajo terminó, finalmente, llegué tranquilamente a casa y leí Facebook en el sofá. No puedo quedarme dormido de noche, así que hojeo la cinta de nuevo.

En Rusia recientemente han publicado Estudio sobre el tiempo dedicado a las redes sociales. El resultado es de 143 minutos durante el día.

La primera campana fue dolor en la muñeca derecha. Pulgar arrojó una carta de resignación a la mesa y se quejó. La segunda razón: en algún momento me di cuenta de que el agua del baño ya estaba fría y me quedé atrapado en el instagram de la clínica de cirugía plástica.

La idea de pasar una semana sin redes sociales vino a mi cerebro inflamado y mi cuerpo frío, cuando, maldiciendo, volví a reclutar el baño.

Condiciones: borro del teléfono Vkontakte, Facebook e Instagram, no leo la cinta, no hago publicaciones, exactamente una semana. Me dejo solo WhatsApp, Telegram y Zombie Farm.

El propósito del experimento: ¿ descubrir si hay vida sin "me gusta"?

El miércoles por la noche envío iconos azules y rosados ​​a la canasta con un corazón pesado. A las 00:00 comienza el experimento.

Dia uno Jueves 15 de septiembre.

Me levanto a las cuatro de la mañana, hoy vuelo a Astana. En un taxi, me sorprendo pensando que ya en el quinto círculo hojeo el escritorio del teléfono. El cerebro requiere información y se niega a trabajar sin noticias de política y ciencia. Tenemos que dar lo que tenemos, un paisaje apagado fuera de la ventana, no un solo accidente o incluso una pequeña explosión.

El taxista dice: "Quería escribir un mega golpe", con miedo de agarrar los auriculares, el dolor universal me cubre. Con el "contacto" remoto, los gigabytes de la música cuidadosamente seleccionada se han ido. Me retorcí como un dolor de muelas, el cerebro se enojó con furia "Este golpe fue golpeado, este golpe fue golpeado" hasta el final del vuelo.

En Astana, se vuelve más fácil. Fotografío el cielo otoñal, la música aparece en los auriculares. Descargué la aplicación Zaycev.net, que de alguna manera me dio la oportunidad de descargar un par de canciones.

Con los taxistas locales nos quejamos sobre los embotellamientos y el tema eterno de "hora de tirar". Llegó automáticamente a Facebook para dar un par de pensamientos profundos sobre el Status Quo en nuestro país. Y una vez más, me esperaba la decepción: ¡nadie sabrá nunca lo irónico que le estoy diciendo a la capital cómo soy ingenioso respecto a los jóvenes!

Los dolores fantasmas atormentan todo el día: siento que no existen huskies, respondo a comentarios que no han aparecido todavía, me alegro de los reportajes por nacer. El cerebro ataca, golpea contra las paredes, exige devolver la droga socialista.

Parece que el episodio con los taxistas y en general mi llegada no existe, porque no hay indicadores que muestren cómo el resto trató esto.

Me sentí raro, cadenas de redes sociales cerradas alrededor de mi cuello, no tenía suficiente aire.

La verdad del primer día: “Los cigarrillos y el alcohol son tan trillados. ¡Dar dependencia informativa! ”.

Dia dos Viernes 16 de septiembre

El segundo día en Astana, me operaron con láser, fue doloroso y frío, y nuevamente no pude hacer el post de mis ojos ensangrentados, quejarme de los analgésicos fallidos, hablar sobre mi entusiasmo y mis nuevos ojos.

El deseo de colgar en Instagram pasó por la noche, mis ojos solo podían llorar. El segundo día pasó en mi niebla. Y me alegré de ello.

La verdad del segundo día: "El dolor es una etapa importante en el camino hacia la obtención de la libertad".

Tercer dia Sábado, 17 de septiembre.

Durante el tercer día me distrajeron de los sufrimientos de las redes sociales yendo al policlínico y visitando a mis familiares. Noté algo asombroso detrás de mí: cuando uno de mis parientes sacó el teléfono, me saqué el cuello para ver qué estaba mirando. Llegué al punto en que le quité el teléfono a mi hermana y miré a los Vain, aunque ya había curvado mis labios en ellos antes.

A mi alrededor, la gente compartió información, discutió noticias, comentó eventos, me asusté jadeando por el aire y no pude insertar comentarios. Una sensación terrible: estar apartado del mundo, abruptamente a aquellos que se han caído del flujo de información y no pueden asentir a sabiendas y estirar algo así como "sí, oído".

En la sala de estar de la tía en la televisión hay algunas series de televisión rusas. Nunca pensé que llegaría a eso, pero honestamente, la historia de la niña Ira, que arrastra a toda la familia hacia ella, me miró con la boca abierta. También le gritaba a los niños que no hicieran ruido.

Lo más terrible para mí en el experimento fue la aceptación de mi adicción. Tres días sin redes sociales me mostraron que incluso ir al baño es un asunto que requiere una paciencia increíble.

La verdad del tercer día: "El propano se eliminó del ambientador".

Cuarto dia Domingo 18 de septiembre

En WhatsApp, amigos, para apoyar, comenzaron a deshacerse de chistes y fotos con los gatos. Por supuesto, el surfing completo no es muy similar, pero bezrybe y los peces cancerígenos, y el acordeón de botones - smishnyavka.

Esta simple verdad me impactó con su efectividad. Cuando empiezas a escuchar todo lo que una persona dice, y no solo a escuchar, para hablarte lo antes posible, la magia comienza. Los ojos del interlocutor se iluminan y todo su ser se vuelve hacia ti. Te conviertes en una fuente de luz y en general una persona de un alma hermosa. Probablemente, para mí será el descubrimiento más sorprendente durante el experimento.

La verdad del cuarto día: "Escuchar es nueva sexy".

Quinto dia Lunes 19 de septiembre

Regresó a trabajar. Finalmente, el equipo periodístico, finalmente, el flujo de información. No comento, solo escucho y entrecierra los ojos con felicidad.

Por cierto, debes arrepentirte, tenías que iniciar sesión en Facebook y Vkontakte, pero honestamente no ingresé en la cinta, aunque vi que estaban publicando una foto con un Dzhigurda desnudo. No sabía desde hacía una semana que Nikita se había afeitado y ya no era un demonio pelirrojo de la música pop rusa. ¡Hasta dónde ha ido el flujo de información!

Se dice que vale la pena encontrar un sueño y que el Universo dirigirá todas sus fuerzas a su cumplimiento. A mí me funcionó, sobre todo el lunes que quería dormir y que el experimento había terminado. Y me quedé sin luz durante dos días.

La verdad del quinto día: "La oscuridad es una amiga de la juventud, en la oscuridad: sueño saludable".

El sexto día. Martes 20 de septiembre

Compilé una lista de servicios que reemplazan las funciones de las redes sociales que extrañé tanto:

Música: Yandex Music, aplicación Zaycev.net.

Comunicación : WhatsApp, Telegram, llamadas (!)

Imágenes: Telegram Channels - Por cierto, no te olvides de ver una selección de canales para los estéticos reales.

Distracción: Call of Cthulhu de Lovecraft, Zombie Castaways, Six, BBTan.

La verdad del sexto día: "Con su conveniencia, crean una zona de confort tan fuerte con su conveniencia que ni un abogado ni una promesa le ayudarán a salir de ella".

Séptimo día Miércoles 21 de septiembre

Último día del experimento. Ya al ​​comienzo de la jornada laboral, entiendo que no quiero que termine.

Durante esta semana entendí mucho: si sufres de un complejo de excelentes estudiantes y te esfuerzas inconscientemente por complacer a todos, las redes sociales te arruinarán. Los gustos y los comentarios no son un indicador de éxito, y mucho menos un indicador de si eres digno de amar o si necesitas reclutar un par de miles de suscriptores más.

La mano ya no alcanzó la cara deseada ... o vk ... en la barra de búsqueda, las fotos permanecieron en la galería y no volaron a través de todas las cuentas, el cerebro perdió el hábito de masticar información y dio lugar a grandes ideas: ¿es este el resultado por el cual se inició el experimento?

Después del final del experimento, todavía fui a revisar mis páginas, y si estás interesado, encontré cinco publicaciones de Vkontakte, dos en Facebook, dos suscripciones de entrega de sushi a Instagram.

La verdad del séptimo día: "No somos tan necesarios el uno para el otro en la red, sino vitales, en realidad".

Ilustraciones: Diyara Shukbarova